sábado, 16 de julio de 2011

SENDERO NOCTURNO PUNTA DEL BOQUERON
16 de Julio de 2011
DISTANCIA: 15 Km.                       
Tiempo: 5 horas
Es la primera vez que vamos ha hacer una ruta nocturna y en esta ocasión vamos en compañía de nuestros amigos de Al-Sendero, una asociación inmejorable.
Salimos del aparcamiento que hay enfrente del cuartel de Camposoto, lugar de inicio también del Sendero de Río Arillo, son las 22,30 y la noche está esplendida, circulamos primero por una pequeña vereda que se encuentra en la línea de la carretera y mas tarde por en carril bici hasta llegar a la entrada de la Playa, son a partir de ahora 2 Km. hasta llegar al inicio del sendero que nos ocupa esta noche.
El sendero discurre por la línea de transición entre las marismas del caño de Sancti Petri y las dunas de la playa del Castillo, terminando en el Monumento Natural Punta del Boquerón, el cual constituye el extremo meridional de una flecha litoral. Estas son formaciones geológicas generadas por la acción combinada del oleaje, las mareas y las corrientes de deriva que van conformando depósitos arenosos y dando lugar a la formación de marismas.

A parte del valor paisajístico y ecológico, que dejamos para cuando hagamos la ruta de día, haremos mención al importante valor histórico que nos lleva hasta la invasión napoleónica, son numerosas las fortificaciones que existen a lo largo de todo el litoral.
La marcha se realiza a buen ritmo hasta que llegamos a las baterías de Urrutia. Lógicamente no tiene nada que ver el aspecto visual al que estamos acostumbrados cuando venimos de día, aunque hoy con luna llena no es necesario utilizar ninguna linterna ni frontales para transitar.
La Batería de Urrutia fue construida durante el siglo XVIII para defender la entrada a San Fernando desde el mar por el Caño de Sancti-Petri, junto a la existente y desaparecida situada en el actual poblado de Sancti-Petri. El nombre de la batería se debe al general José de Urrutia, que fue Ingeniero General del Ejército Español, cargo desde el que dio vida al Cuerpo de Ingenieros militares.
La Batería jugó un papel decisivo en el retorno de la monarquía absolutista a España tras el periodo conocido como trienio liberal. En 1823 la Guarnición de la Batería, formada por el Regimiento San Marcial, a la sazón uno de los mas potentes de la zona de la Bahía, se sublevó y entregó la posición apoyando al Duque de Angulema que al mando de los Cien Mil Hijos de San Luis trataba de volver a sentar en el trono al rey Fernando VII.
Medio oculta por la vegetación sobre la que asoman los merlones, su interior, cubierto de maleza, aún muestra los rasgos reconocibles de un patio de armas y recintos para la guardia y accesos al paseo de ronda.
Su planta es rectangular y en el frente que mira al río está protegida por un potente lienzo de murallas, que en uno de sus extremos es curvo para proteger el flanco derecho. La subida de las arenas de la zona, ha dejado las murallas bastante bajas.
La estructura de la muralla esta preparada para la instalación de artillería, quedando cerrada por la parte posterior por una cerca con apertura central que da acceso a un amplio patio de armas en el que se instalaban las diversas dependencias de la guardia, almacenes, etc... (Resumen Wikipedia)
Ha llegado la hora de reponer, paramos en la misma Punta del Boquerón, llevamos café y bizcocho, aparte de alguna barrita energética y agua, la vista es genial el Castillo, todo el poblado de Sancti-Petri, marismas y la orilla iluminados por la Luna dan un aspecto muy interesante. Lástima que con la cámara no se vean mejores vistas, pero difícilmente vamos a obtener buenas tomas de más de 3 ó 5 mtrs con flash.
Bueno después de un descanso caminaremos por la playa hasta la entrada y sin demora nos dirigimos hasta los coches pues vamos a terminar de andar a las tres de la mañana, la experiencia ha sido muy agradable y ha merecido la pena.
CARLOS Y PETRA MIEMBROS AL-SENDERO

sábado, 2 de julio de 2011

SENDERO SUBIDA MULHACEN
2 y 3 de Julio de 2011
DISTANCIA: 9 Km.                       
Tiempo: 4 horas.

Hemos elegido este fin de semana para realizar nuestro primer intento de aproximación a la máxima elevación de la península.
El Pico Mulhacén es conocido por ser el más alto de la península con sus 3.482 metros. Pero también es conocido por llevar el nombre de un sultán que reinó en Granada. El rey Muley Hacen que sucedió a su padre Muhammad XI en el poder en 1465. Cinco años después de acceder al trono, finalizó el tratado de paz que su padre había establecido con los cristianos. A partir de entonces las relaciones con éstos comenzaron a deteriorarse ya que Muley Hacen comenzó a hostigarles. Los cristianos, hartos de esta situación, se levantaron y en 1482 tomaron Alhama, plaza que ya no recuperarían. Cuando falleció, fue enterrado en el pico más alto de Sierra Nevada, conocido en su nombre y desde entonces como Mulhacen.

Bueno, bueno, anticipemos que la experiencia ha sido magnifica, súper gratificante, habíamos leído y escuchado tanto dentro del mundillo del senderismo que no queríamos dejar pasar más tiempo sin intentar este nuevo reto para nuestros cuerpos, nuestras mentes, nuestras vidas.
Desde el principio teníamos una cosa que nos preocupaba por encima de todas, no era la exactitud del recorrido, ni las carreteras, ni la comida, sino las dificultades de respiración, la concentración de oxigeno en las diferentes alturas, problema que nos podíamos encontrar partiendo desde una altitud cero. Es por esto que elegimos este fin de semana, dos noches, tres días para ver como reacciona nuestro organismo.
Salimos de casa el viernes a las 2 de la tarde y nos dirigimos hacia Jerez, teníamos que recoger a María en su trabajo, junto con Carlos, Petra, Carlos Jesús y Lourdes, integrábamos el grupo que impacientemente enfilábamos la A-381, con rumbo a Orgiva, pueblo de la Alpujarra Granadina que se encuentra a unos 550 mts de altitud, después de cuatro horas y media, soltamos las mochilas y nos refrescamos en la piscina, aquí pasamos nuestra primera noche. Se me ha puesto el ojo como un perito de mayo, después de picarme una avispa, así que decidimos desplazarnos al ambulatorio donde el médico me recomienda pincharme un urbazón.
Nos levantamos a las siete de la mañana preparamos las cosas y nos vamos del tirón para Capileira, mi ojo esta mucho mejor, con lo que desaparece una preocupación, aquí desayunamos, cruzamos el pueblo por su calle principal siguiendo las instrucciones del amable camarero y durante diez km. la carretera pasa a ser una pista de tierra pero en buen estado.
Nos habíamos preguntado más de veinte veces como llegaríamos a la Hoya del Portillo, que como era, que donde estaba, al fin aquí estamos un poco nerviosos, se nota la tensión, pero las caras son de valentía y entusiasmo.
Iniciamos nuestro sendero después de saludar al guarda en la Hoya del Portillo eran las 10,30. Justo detrás de la caseta el camino se adentra en un hermoso pinar por el que se va ganando altura rápidamente, la senda esta perfectamente señalada, en algunos momentos tenemos que parar pues se nota la altura, en este primer tramo son 200 metros de desnivel, pero valla desnivel. Salvo a Carlos Jesús que se adelanta, nosotros vamos a un ritmo más lento, una pendiente detrás de otra, nos obliga a beber agua y descansar.
Una vez que salimos del bosque la cosa cambia la pendiente se suaviza y aumenta el entusiasmo, pues ya vemos perfectamente El Veleta, El Fraile, Los Raspones, Loma Pelá, Puntal de la Caldera, Mulhacen II, todas las cumbres se encuentran cubiertas de nieve y estamos en julio, sin darnos cuenta llegamos a un cruce que a la izquierda nos indica Refugio de Poqueira, paramos a descansar y tomamos alguna fruta, los labios lo tenemos secos y cuidadito que a la sombra empieza a sentirse algo de fresco. Unos 200 metros en subida nos permite llegar a Puerto Molina donde las vistas son espectaculares y unos paneles informativos nos cuentan historias y vivencias.
Bajamos rápidos porque María y Lourdes se han quedado haciendo fotos y más fotos, otra vez los cinco siguiendo las indicaciones continuamos, es curioso ver como se han achaparrados los árboles con la acción del viento y la nieve, buscar adjetivos se nos hace muy difícil, pero más difícil se me va hacer colocar las fotos en esta crónica.
Dejaremos un pequeño cortijo ganadero a nuestra izquierda y nos fascinamos de lo espectacular del paisaje, sus rocas, sus piedras.
A parte de los Esquistos (constituyen un grupo de rocas metamórficas de grado medio, notables principalmente por la preponderancia de minerales laminares tales como la mica, la clorita, el talco, la hornablenda, grafito y otros. El cuarzo se halla con frecuencia en granos estirados, el esquisto contiene más de un 50% de minerales planos y alargados, a menudo finamente intercalados con cuarzo y feldespato) característicos de toda la zona con las que incluso están construidas todas las viviendas, encontramos restos de mármol rosa y blanco.
Se hace difícil elegir el lugar a donde dirigir nuestras miradas, no cesamos de llamar la atención unos de otros, hemos cruzado dos pequeños arroyos y vemos muy a lo lejos El Refugio, en algunas rocas con pintura blanca nos van indicando la distancia que nos queda por recorrer, llegamos a un pequeño cruce, decidimos acercarnos a unos neveros que poderosamente nos atraen, nieve, aquí y ahora, Lourdes dice que vamos a verla, dicho y hecho.
Quedamos encantados al ver estos ríos, cuevas, “lo primero es lo primero, bolazos de nieve que van y vienen”, el agua esta helada, corta la piel, pero la sonrisa llega de oreja a oreja, continuamos subiendo casi a llegar a los 2.800 mts de altitud donde decidimos parar para comer son las 2,30 y el cansancio se nota.
De este tramo tenemos tomadas casi 300 fotografías, de nuevo nos dirigimos sobre nuestros pasos hacia el cruce pero por un carril que sale a nuestra derecha, un panel informativo caído nos hace en el buen camino hacia el Refugio para lo que nos faltan 2,2 Km.
Las piernas nos pesan, parece como si lleváramos plomo en las botas, menos mal que es cuesta abajo, no faltan las chorreras que en algunos casos inundan el carril y nos obliga a cruzar con precaución.
Hemos llegado al Refugio de Poqueira, no es el único del parque Nacional de Sierra Nevada que dispone de guardas durante todo el año. Se encuentra situado en las faldas del Mulhacén a 2.500 metros de altitud.
Este refugio posee dos plantas y tiene una capacidad para 76 personas. La planta baja está formada por varias salas, otra de las salas está acondicionada para que los montañeros que llevan su propia comida cocinen y puedan comer tranquilamente y por último, hay un salón enorme con chimenea y numerosas mesas. En este salón es donde se sirven las cenas que hacen los del refugio, que son muy abundantes.
Después de alojarnos y ver toda la zona, decidimos visitar el río Mulhacen, senda habitual de los que se dirigen a la cumbre de cualquiera de los picos que nos rodean, pasando por el refugio de la Caldera.
Nos parece suficiente, así que nos volvemos y descansamos después de una buena ducha y un buen café, enseguida llega la hora de la cena, sopa, pastas, carne y postre.
Salimos al porche y hace fresquito, tanto que no podemos estar sin sudadera, pero merece la pena, pronto nos vamos a dormir, pues mañana nos espera la vuelta, hemos disfrutado tanto, que tan solo nos queda dar gracias por tan especial jornada. No debemos dejar pasar mucho tiempo para volver.
Las 6,30 de la mañana sin haber dormido casi nada, nos levantamos, nos vamos a desayunar, hay de todo, café, zumo, tostadas, estupendo. Recogemos y una vez cargadas nuestras mochilas nos dirigimos hacia la Hoya del Portillo, es el único momento donde noto que me falta el aire y es que a la salida del refugio hay una buena pendiente que te hace resoplar, pero una vez pasada en unas dos horas llegamos al coche, ahora tranquilos para casa.
Durante el camino de regreso la sucesión de imágenes es continua, “ah” papá tenemos que parar para comprarme el anillo, vale, vale. A las 17,30 estamos en casa.
ENLACE FOTOGRAFIAS
CARLOS Y PETRA MIEMBROS DEL CLUB AL-SENDERO

domingo, 19 de junio de 2011

SENDERO SUBIDA A LA CRUZ DE ROMERO
19 DE JUNIO DE 2011
DISTANCIA: 15 Km.                       
Tiempo: 7 horas

Quizás sea este uno de los senderos que más nos apetecía realizar pues de las tres veces que habíamos estado en el Canuto del Risco Blanco, siempre decíamos “bueno la próxima vez subiremos a la Cruz de Romero” y es que después de recorrer esta maravilla de selva que forman los valles del Almodóvar y el Tiradero, nos quedaban las ganas de ver algo más, de aprender algo más, de saber algo más de este paisaje tan indescriptible, tan apasionante, probablemente uno de los rincones más bello de Europa.

En la autovía A-381 Jerez – Los Barrios nos saldremos a la altura de la vía de servicio núm. 77 y nos dirigimos a la izquierda hacia la CA-221 Los Barrios – Facinas, hoy es una pista forestal que en algunos tramos se encuentra en  mal estado.

Con precaución circularemos durante unos siete Km., disfrutando de la presencia de magníficos alcornoques, donde ejemplares de cochinos negros engordan con sus bellotas, llegaremos hasta el cartel de inicio de sendero del Canuto del Risco Blanco, podemos aparcar aquí o en las inmediaciones de San Carlos del Tiradero.

Justo enfrente de la angarilla donde comienza el sendero de San Carlos del Tiradero, hay una disimulada puerta realizada por alambradas y es aquí donde con más de 28º comienza nuestra ansiada ruta.

A nuestra izquierda nos acompañará durante todo el trayecto un muro de piedra magistralmente realizado y una vaya cinegética de gran altura, no hay pérdida, hasta la misma base de la laja donde se encuentra el vértice geodésico, no nos abandonará, será nuestra referencia incluso en días de intensa niebla.

En el bosque que nos vamos adentrando disfrutaremos incluso de la presencia de venados, pero seguramente nos llamará la atención ver las piedras, las grandes rocas y los troncos de los árboles recubiertos de musgos, plantas trepadoras y helechos, aquí los Quejigos son muy hospitalarios pues permiten que especies como la Carraguala y el Pulipuli habiten en sus ramas.

Llegamos a una pendiente donde tendremos que agarrarnos con manos y pies para poder sortear su desnivel “esto es una pared”, “donde nos hemos metido”, con bastones y manos todos ayudaremos  a quien más lo necesitan, después de algún sobresalto ponemos fin al quejigal y llaneamos un rato las vistas empiezan a ser fantásticas, nos llamará la atención el pantano de Almodóvar y el tajo del Águila de la Sierra de Ojen, andaremos por un  pinar de repoblación que nos cobija con su sombra en algunos tramos.
Descansamos al amparo de una gran formación de arenisca, donde aprovechamos para desayunar, han pasado casi dos horas desde que empezamos y viendo el cortafuego por donde vamos a transitar a alguno se le atraganta hasta el agua. Reponemos fuerzas y tomamos alguna fruta, agua y bebida energética, nos va hacer falta
El calor hace mella, las rodillas duelen, la espalda chorreando de sudor, las caras rojas y algunos hablan como en arameo, pero se denota por encima de todo una gran satisfacción. Hay quien no puede continuar y decide esperar al regreso del grupo a la sombra, no todos los días se encuentra uno con las mismas fuerzas, y hoy llevamos un desnivel continuo acumulado de casi 600 Mtro.
Una valla metálica nuevamente cruzaremos para acercarnos a una nueva “sorpresa”, formaciones de areniscas cruzadas por lajas de hierro dando formas de lo más singular, cuevas, arcos gigantes que jamás te puedes imaginar, callejones, rampas, formaciones que harán la delicia de nuestras miradas “cara de perro”, “dragones”, “tortugas”, son algunas de las semejanzas que se nos ocurren.
La jara, el brezo, la retama, nos arañan y enganchan en el caminar, pero este pequeño sufrimiento, no es nada con la satisfacción que recorre todo nuestro cuerpo y nuestras mentes, ya somos más de uno a quien se le ocurre lo de quedarse aquí pero…
¡Venga, señores vámonos! que todavía queda tela, sin dejar de volver la mirada a cada paso, poco a poco, por el mismo camino regresamos hasta la alambrada y base de mole arenisca de casi 20 mts de altura donde nos espera el vértice geodésico de La Cruz de Romero.
Por la parte izquierda buscaremos una grieta donde iremos apoyando manos, pies, hombros, codos y culos para poder subir al final hay quien no puede pero algunos lo conseguimos y es que merece la pena, Zahara, Vejer, Facinas, Sierra del Aljibe, Sierra de Fates, Sierra Luna, Sierra de la Plata, Gibraltar, son alguno de los innumerables objetivos de nuestras cámaras.
Todos estamos maravillados, las formaciones son gigantescas, cada vez vemos nuevos parecidos y a pesar del calor las roca desprende un fresquito agradable.
“Oé, Oé, Oé, Oé, se brinca de alegría, se canta de emoción, tanto esfuerzo ha  sido recompensado
Con la misma sensación de nostalgia que en las formaciones de arenisca empezamos el regreso, nuestro amigo Fermín espera abajo con las niñas, ha sido una experiencia inolvidable.
Un primer hito de piedra nos señala la dirección para El Risco Blanco, pero se hace tarde y todavía no hemos comido, así que decidimos coger el segundo hito que nos conducirá a través del canuto a donde aparcamos por la mañana. El camino con algún desnivel se encuentra marcado por montoncitos de piedra (hitos) a los que tenemos que prestar atención para no extraviarnos.
Pronto pasamos por unos pinos y enseguida nos vemos inmersos en un fantástico quejigal, con lianas enredaderas y pronto el arroyo que con poca agua nos acompaña hasta un carril. Por este andaremos  durante 40 minutos y comeremos y beberemos agua hasta saciarnos.
Poder explicar lo que hemos sentido es tan difícil, que quizás se escriba alguna tontería, pero nosotros estamos más que satisfechos, ha sido un “rutón” no una ruta, bestial, pero tan magnifico como hermoso, bueno voy a comerme mi bocadillo de tortilla, ah y un poquito de queso, ah y una naranja, ah y un plátano, ah y un huesito, ah y mucha agua.  
CARLOS Y PETRA MIEMBROS DE AL-SENDERO

lunes, 6 de junio de 2011

SENDERO VEJER, SANTA LUCIA
5 DE Junio de 2011
DISTANCIA: 14,9 Km.
Tiempo: 5  horas
Con nuestros amigos del Club Al-Sendero, a los que tenemos que estar agradecidos por su magnífica compañía, hoy nos hemos trasladado a la vecina localidad de Vejer de la Frontera para realizar una bonita ruta circular através de caminos y vegas. Uno de los enclaves más significativos que visitaremos es Santa Lucía. 
Una vez que aparcamos en La Barca de Vejer, después de haber salido de casa a las 6,30 horas, subimos por la antigua carretera y poco a poco obtenemos magníficas vistas.
La pendiente es dura pero cortita, enseguida estaremos en las calles de tan singular población con una historia apasionante. Buscaremos la carretera de San Ambrosio que se encuentra en el lado opuesto, dirección a la costa. Mientras transitamos por el sendero habilitado de Bellavista durante 1,5 Km. es entonces cuando doblamos a la derecha por un carril.
Las vistas son magníficas por un lado las playas de Conil, Vejer, Barbate y Zahara, por otro toda la vega con sembrados de cereales y girasoles. La sombra de los árboles nos cobijan y caminando casi paralelos a la playa llegamos por un camino de herradura a un pozo de riego bastante grande y nos adentramos en un tubo de vegetación durante unos minutos donde no se consiguen ver los rayos de sol.
Por pequeños carriles pegados a zonas de siembra vamos transitando, como dándole la vuelta a todo Vejer, hasta llegar al Centro de Alta Resolución de la Consejería de Salud.
Ahora andamos unos minutos para cruzar la carretera por un túnel y continuaremos durante un kilómetro hasta la intersección de Santa Lucía, en este enclave estuvimos hace 10 años y no había ni gota de agua, esperamos tener hoy más suerte.
Y así es, magnífico desde el inicio el agua circula por las acequias, rebozando por todos lados, una fuente a nuestra derecha nos sirve para llenar nuestras botellas, muchos vecinos beben de este lugar pues dicen que esta agua es muy buena para el riñón.
Nos llama la atención el ruido que produce una cascada y nos acercamos a verla, todo está exuberante de vegetación. Es el momento para desayunar, son las 10,30 h. y este es el lugar idóneo.

Este entorno natural, conocido como "Paraje de los Molinos", situado a 3 Km. de Vejer, pueblo al que pertenece esta pedanía, está declarado Monumento Natural por su riqueza de paisaje.
Actualmente Santa Lucía, tiene unos 193 habitantes, que basan su economía en la agricultura; en sus tierras existen abundantes huertas y árboles frutales. Cuenta con una exuberante vegetación, debido a la riqueza del suelo y a la cantidad de agua existente, ya que está ubicada en la ladera de la Meseta de la Muela.
Junto al acueducto de origen posiblemente romano que se encuentra en este paraje natural se construyeron siete molinos de agua (cinco en la actualidad) del siglo XV, que se utilizaban para moler trigo y obtener harina. En la actualidad se conservan algunas piezas de éstos, como por ejemplo, restos de los cubos y varias piedras de molino.

El agua, que procede del Manantial de la Muela, es en su día conducida mediante una delicada obra de ingeniería que aprovechando los desniveles naturales del terreno, o creándolos artificialmente mediante acueductos, permite el funcionamiento de cinco molinos denominados: Santa Lucía, Hoyo, Batán, Garrobo y Miraflores. Derivaciones transversales a la vena de agua principal dan pié al riego de las huertas del entorno.
Después de visitar los molinos y el acueducto vamos a dirigirnos a través de la cañada “Camino Rural Verde Cabra” hasta donde dejamos los coches, nos espera un trayecto de 4 Km. aproximadamente por un camino árido y sin arboleda, pero en la retina tenemos las imágenes de lo vivido momentos antes, llenos de alegría y satisfacción  empezamos a ver en nuestro caminar las primera torres de Vejer, nos acompañarán hasta el final.

Desde que comenzamos esta mañana han pasado 5 horas y ha merecido la pena, antes de subir a los coches tomamos un refresco en la Venta Pinto. Mientras que charlamos preparando la siguiente ruta.
CARLOS Y PETRA MIEMBROS DEL CLUB AL-SENDERO

domingo, 15 de mayo de 2011

SENDERO SANTUARIO NTRA. SRA. DE LOS SANTOS

DISTANCIA: 16,5 Km.                       
Tiempo: 5 horas.

En más de una ocasión nos veremos obligados a variar la ruta trazada por diversos motivos, hoy teníamos previsto hacer una ruta lineal desde el Santuario hasta el descansadero pastoril de la Fuente de la Higuera, pero nuestra sorpresa fue que no pudimos cruzar el río del Álamo por su fuerte caudal.

Con nuestros amigos y compañeros del Club Al-Sendero partimos de Chiclana a las siete de la mañana, veintidós socios con dirección al Santuario Ntra. Sra. de los Santos, en la parte izquierda parte la vía pecuaria más importante de la comarca de la Janda “Cañada Real Marchantiega”.

Durante el recorrido veremos pozos, fuentes, descansaderos y construcciones muchas de ellas en estado de “semi-abandono”.

A esta hora de la mañana las vistas son inmejorables y el cantar de las aves y el fresco en la cara, hacen del andar un placer. Rodeando el Santuario podemos observar su antigua muralla de contención, pues no en vano parece ser que esta construido sobre una defensa militar.
Enseguida llegamos a los meandros del río del Álamo a través de encinas, matorrales de lentiscos y poleos entre otros. Las elevaciones alomadas que nos rodean generan un paisaje completamente distinto de las montañas por ejemplo de nuestro Parque de Grazalema.

Una de nuestras sorpresas fue pasar por debajo del viaducto de Tabladas, para a través del Cordel de las Hoyas llegar a nuestro destino.

Pero afortunadamente, el nivel del río desaconsejaba el cruzarlo y después de mirar por el entorno buscando otra posibilidad desistimos de ello, porque se encuentra rodeado de una arcilla pegajosa que hace impracticable el caminar.
Emprendemos la marcha un poco desilusionados en dirección Este, pero nos damos de cara con un pequeño bosquecillo que va generando el río, el aspecto es fantástico, con enredaderas que llegan a lo más alto, nuestra desilusión se va desvaneciendo poco a poco y caminamos algunas veces bastante embarrados hasta llegar a una angarilla.
Preguntamos a un vecino que amablemente nos abre y nos dispone en buen camino, a través de la vereda de Medina información que desconocíamos, nos cruzamos con algún ganado pero no se inquietan ante nuestra presencia numerosa, cruzamos otra angarilla y ahora una amable señora nos ratifica la información.
Vamos disfrutando de árboles, plantas y animales a Lourdes casi se le enreda una vicha en la pierna, pero ni se inmuta. Pasamos por un cercado de caballos y una simpática mula parece que nos saluda gentilmente.
Llegamos al cruce de la carretera comarcal de Alcalá-Medina por la que nos quedan que transitar 4 Km., así que decidimos parar y desayunar para reponer fuerzas, una simpática señora nos ofrece el patio de su casa para que nos encontremos a la sombra, sobradamente agradecidos.
Ahora extremando las precauciones por la dicha carretera nos dirigimos hacia Alcalá, cruzaremos un pequeño puente y pasamos un cruce luego un segundo puente mayor y llegamos hasta la señal de inicio de la Vereda de Barbate.
La estación depuradora a nuestra derecha es indicativo de encontrarnos en el buen camino, pero vamos a tener que quitarnos la botas para cruzar el río Barbate cosa que nuestros pies agradecen por el fresco del agua, dispuestos a la marcha, pasamos por túneles forestales, bellos paisajes y varios cortijos ganaderos.
Después de un camino cómodo y apacible con sauces, chumberas y robles, llegamos al “Cortijo de Barbate”, construcción muy atractiva donde varias cigüeñas anidan, siempre con el río a nuestra izquierda llegaremos hasta el túnel que pasa por debajo de la autovía Jerez-Los Barrios, cruzamos la carretera nacional y llegaremos a la entrada del Santuario.
Visitaremos a la Santísima Virgen donde algunos realizan sus plegarias y dan muestra de su Fe.

Ruta más que fantástica, ya veis sin esperarlo, con cambios de última hora, por cañadas, por veredas, con vacas, con gigantescos pozos, con fango, pero podéis creerlo, más que fantástica.

CARLOS Y PETRA MIEMBROS DE AL-SENDERO