miércoles, 7 de septiembre de 2022

SENDERO MONASTERIO SAN JUAN DE LA PEÑA NUEVO Y VIEJO, MIRADOR DE LOS PIRINEOS


DISTANCIA:  7,2  km. Circular

Tiempo: 4 h.

Dificultad: BAJA

LOCALIZACION: JACA, P. N. Ordesa y Monte Perdido, Torla, Pradera de Ordesa

Permisos:  NO

Acceso: Ctra. N 240 y desvío hacia A – 163 Jaca - Botaya

Fecha de Realización: 16 de Agosto de 2022

Ascenso:  187

Coordinador: Carlos Bellido

Descenso:  178

OTRAS RUTAS POR LA ZONA: SENDERO LAGOS DE ASTÚN - COL DES MOINES o PUERTO DE JACA

 

 

 

 

 

 

Hoy es nuestro cuarto día en Jaca y tenemos previsto una jornada un poco más tranquila, vamos a visitar el Monasterio de San Juan de la Peña, este se encuentra en la sierra del mismo nombre dentro del paraje protegido San Juan de la Peña y Monte Oroel, se accede por una estrecha carretera de montaña después de pasar por el pueblo de Santa Cruz de la Serós. Su nombre, “de la Serós”, hace mención a las religiosas (sorores o serols) que establecieron allí su monasterio benedictino hasta finales del siglo XVI, momento en que se trasladó a Jaca. Lo único que queda del mismo es la magnífica iglesia de Santa María, joya del románico aragonés y contemporáneo de la Catedral de Jaca.

Después de inclinadas curvas que hay que tomar con precaución, dejamos a la derecha el Monasterio Viejo, aquí no podemos aparcar, continuamos con más curvas y aparece a nuestra izquierda el fantástico Monasterio de San Juan de la Peña. Nos dirigimos a la taquilla para comprar la entrada necesaria para la visita, que incluye los dos Monasterios Nuevo y Viejo, la Iglesia de Sta. María en Santa Cruz de la Serós y la subida y bajada en autobús. El precio es de 12 Euros / persona y bajo nuestro punto de vista merece la pena.

Como consecuencia del terrible incendio del año 1675, se tomó la decisión de construir un nuevo monasterio. Su emplazamiento se eligió en un lugar próximo, el conocido como Llano de San Indalecio, una bella pradera asentada sobre la gran roca que reunía condiciones idóneas para comenzar una nueva vida. La construcción de la nueva fábrica se inició en el año 1676. A lo largo de sus obras, prolongadas hasta los primeros años del siglo XIX, los monjes contaron con el asesoramiento de numerosos profesionales, siendo fundamental la labor del arquitecto zaragozano Miguel Ximénez, quien diseñó este conjunto monástico. (Todos los datos son extraídos de la página oficial del Monasterio).

Hoy desayunamos frente al hotel, café, tostada y zumo
por 4,50 euros

Llegamos al aparcamiento después de recorrer algo más de 20 km.
y pasando por el bonito pueblo de Santa Cruz de la Serós

Conocido como Monasterio Nuevo, se empezó a construir en el
siglo XVII, una preciosa obra barroca, se encuentra en la pradera de San Indalecio
un entorno de gran belleza declarado Paisaje Protegido.
Su interior alberga la iglesia y el Centro de Interpretación del Monasterio.
La fachada de la iglesia es uno de los aspectos más interesantes del monasterio barroco.
 Destaca especialmente su exuberante decoración vegetal basada en roleos, diferentes
 tipos de flores, hojas de acanto y tallos, aunque también encontramos formas figuradas
 como cabezas de puttis y dos ángeles sujetando un singular escudo en la parte superior.
 En sus hornacinas se incluyen tres santos muy vinculados con los monjes que vivieron
 entre estos muros. En la portada central se representó a San Juan Bautista (patrón de 
esta comunidad), a la izquierda a San Indalecio (advocación de la pradera en la que 
se levanta el edificio), y a la derecha a San Benito (fundador de la orden monástica
que se profesaba en San Juan de la Peña).
Nos dirigimos al punto de información para adquirir las entradas

En su interior, una original estructura hace que el visitante, caminando
 por un suelo de cristal, pueda ver bajo sus pies las diferentes
dependencias de lo que fue el Monasterio: las habitaciones de servicio,
 la cocina, la botica, el refectorio, la bodega y la despensa… todas ellas
 ambientadas con figuras de frailes a tamaño natural, muebles,
 utensilios, etc., para poder comprender las enormes dimensiones de este monasterio.
A través de paneles informativos, pudimos descubrir todas
 las claves de la vida cotidiana de San Juan de la Peña, junto con un
 amplio muestrario de objetos originales de ambos monasterios.





Finalizamos nuestra visita al Monasterio Nuevo, ahora por un
precioso sendero vamos hacia el Monasterio Viejo
El territorio en el que se encuentra San Juan de la Peña es un espacio
 natural con una biodiversidad sorprendente. La gran roca
 que le da el nombre, al igual que Oroel, es un enorme sinclinal
 colgado de conglomerados, con cimas en los montes de Cuculo y San Salvador.



En nuestro camino muy bien señalizado encontramos este curioso nevero


Muchos paneles nos van informando del espectacular
enclave donde nos encontramos
Llegamos al mirador de San Voto, un espectacular balcón
El Paisaje Protegido dispone de seis miradores desde donde asomarnos
a disfrutar del paisaje.
Nosotros recorremos dos de ellos este de San Voto y luego el Balcón del Pirineo
Hornacina de la Capilla de San Voto
Restos de la Capilla
dice la Leyenda que aquí fue donde empezó toda la
historia del Monasterio Viejo
Es un camino de gran belleza que formaban parte de los jardines
 de los Monasterios invitan al silencio y la meditación
Este sencillo sendero, equipado con paneles interpretativos sobre especies 
de flora y fauna más características del espacio natural protegido, 
acerca al visitante a los restos de la ermita de finales del siglo XVI
 consagrada a San Félix y San Voto.
Encontramos algunos tramos escalonados y con cuerdas para agarrarse


Desde este punto existe un ramal del sendero que, a través de una
 escalinata de piedra acondicionada alcanza el mirador de San Voto,
 desde donde se observa una extraordinaria vista del valle
del Monasterio Viejo bajo el conglomerado de San Juan de la Peña.
Regresando a la ermita, se retoma el camino que continua hasta
 la pista de San Salvador, que se toma hacia la izquierda,
 a unos 200 m. de su comienzo.

Llegamos al Monasterio Viejo
Los orígenes exactos del monasterio no están claros, se cree que pudo
ser refugio de eremitas, pero lo que si está claro gracias
a la documentación, es que en el siglo X se fundó un pequeño
monasterio dedicado a San Juan Bautista, del que quedan algunas partes. (Rutas y Viajes)

En la zona alta del Monsaterio de San Juan de la Peña
 está el Panteón de los Nobles, en el que podemos ver 22 tumbas
 incrustadas en el muro, separadas entra si mediante arcos de medio
 punto ajedrezados, destacan cruces y crismones, y también algunas
 inscripciones con la fecha de la muerte, La más antigua hace referencia de 1080.
Aquí recibieron sepultura reyes de Aragón como Ramiro I,
 Sancho Ramírez y Pedro I. El rey Alfonso I el Batallador en 1134, 
rompió con esa tradición familiar, siendo sus últimas voluntades
 la de enterrarse en el monasterio de Montearagón.



Entre el Panteón de Nobles y la gran peña, se encontraba
 el Panteón Real con los reyes de Aragón, del que quedan algunas
 tumbas antropomórficas. En el siglo XVIII el rey Carlos III,
hizo construir el lujoso Panteón neoclásico.
La reforma cluniacense propició la construcción del claustro, 
cuyas obras acabarían en el siglo XII. Este conserva prácticamente
 íntegros dos de sus lienzos. Hay dos etapas constructivas, 
la de finales del siglo XI con influencia jaquesa en la que los
 capiteles representan animales fantásticos y motivos
 geométricos y vegetales. Y la otra del último tercio del siglo XII, 
formada por veinte capiteles, hechos por el llamado maestro 
de San Juan de la Peña o Maestro de Agüero, autor anónimo
 que representa escenas bíblicas como la Natividad, la Anunciación, el Bautismo, 
la Última Cena, o la Creación de Adán y Eva.
Son bajorrelieves abigarrados (horror vacui), con figuras que se
 contorsionan con gestos exagerados en cuerpos y caras. 
Estos capiteles son francamente maravillosos, podríamos estar mirándolos horas, 
pero hay que continuar.
Sobre la iglesia prerrománica se levantó la románica, construida en dos fases, la primera durante el reinado de Sancho el Mayor, y la segunda durante el del rey Sancho Ramírez, que cede el conjunto a los monjes cluniacenses, siendo consagrada en el año 1094. Es de una sola nave y tres arcos triunfales dan paso a una magnífica cabecera de tres ábsides de planta semicircular cubiertos con bóvedas de cuarto de esfera con unos pequeños tramos rectos con bóveda de cañón. El altar mayor está dedicado a San Juan y los dos laterales a San Miguel y San Clemente. En el altar podemos ver una réplica del Santo Grial.


El Monasterio de San Juan de la Peña es parada del Camino de Santiago y lugar de leyendas, como la que vincula este lugar con el Santo Grial.
Cuenta la leyenda, que en España el Santo Grial, estuvo en el monasterio desde 1071 hasta 1399, atrayendo a numerosos peregrinos que acudían a él para ver la reliquia. En 1399 el rey Martín I lo trasladó al palacio de la Aljafería de Zaragoza, después a Barcelona, y Alfonso V la depositó finalmente en la catedral de Valencia en el año 1436 con el nombre de Santo Cáliz.
El Santo Grial que vemos en el altar de la iglesia es réplica del "original"



Finalizada la fantástica visita al Monasterio Viejo,
esperamos al autobús que nos llevará al Monasterio Nuevo 

Desde donde nos ha dejado el autobús, buscamos este bonito mirador
A la izquierda del monasterio comienza una senda,
 donde vemos paneles que informan sobre la flora y la fauna del sitio. 
Esta subida se conoce como Paseo de San Vicente,
Una vegetación exuberante nos acompaña
durante el corto recorrido
Aunque con algunas nubes las vistas son increíbles
Un privilegiado mirador desde donde se dominan algunas
de las cumbres pirenaicas más importantes, desde el Bisuarín
al macizo del Monte Perdido, pasando por el acollarada o el Midi d’Ossau.
Nombres de cumbres que podremos descubrir con la ayuda de un gran panel de piedra.


Finalizamos nuestra visita y os puedo asegurar
que ha sido más que interesante

Bibliografía: Guía del Excursionista del P. N. Sierra de Grazalema de Manuel Becerra Parra Editorial La Serranía -  Guía del Excursionista Sierra de las Nieves de Rafael Flores Domínguez y Andrés Rodríguez González de Editorial La Serranía  -  Cuadernos de Campo Payoyo - Guía del Excursionista de Enrique A. Marín Fernández, Editorial La Serranía – Diputación de Huelva - Diputación de Cádiz - Diputación de Málaga - El Tercer Tiempo – El Blog de Manuel - Página Oficial GR 247 - Junta de Andalucía, Consejería de Medio Ambiente - Wikipedia - Diputación de Jaén – FAM – Turismo de Andalucía – Por los Cerros de Úbeda– Aristasur - NATIONAL GEOGRAFIC - Revista PH 84 –  Wikiloc – Nuestra Historia (Alhama.com) – Mis Paseos por el Campo – Mil Planes – Trotones Blog – CEDER Serranía de Ronda.

2 comentarios:

  1. Muy interesante el reportaje. Uno de los muchos lugares que tengo pendiente de conocer. Muchas gracias por acercarlo. Saludos

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    1. El lugar es interesantísimo, merece la pena por su historia y belleza.

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