DISTANCIA: 7 Km. Ida y vuelta
Tiempo: 5 horas
Para este día se había pedido
permiso a la Oficina del Parque de Grazalema, pues es requisito indispensable
para poder realizar este sendero. El Sitio más alto de la provincia de Cádiz,
con sus 1.648 mts. No sabemos si habría vértice geodésico, hoy por hoy no lo
vemos.
Llegamos al punto de inicio en la
carretera de Benamahoma a Grazalema perfectamente identificado, se deja el
coche en la parte derecha de la carretera y justo en frente se encuentra el panel
con el recorrido.
Comenzamos tranquilos, no en vano
ya es la segunda ascensión que realizamos y recordamos que la primera vez lo
pasamos mal, hace de esto unos seis años, además hoy me ha tocado conducir al
grupo. Treinta y tres senderistas con mucho ánimo e ilusión.
Al principio la vegetación casi
nos cubre totalmente, pero poco a poco va desapareciendo, las vistas son
inmejorables, así que de vez en cuando paramos para poder descansar y otear el
horizonte, pues de verdad merece la pena.
Mi mayor preocupación ahora mismo
es estar en contacto a través de “Walki” con la cola del grupo, donde está José
María Scouts, conviene ir despacito para que todos lleguemos a la cumbre.
Muchas plantas nos acompañan pero
una muy particular que se denomina de los Ballesteros. Esta se la conoce así
porque produce un líquido con el que se envenenaban las puntas de las flechas,
allá por la edad media y también utilizada en pequeñas dosis sirve para
enfermedades del corazón.
A los 1.200 mts de altitud
aparecen las primeras manchas de nieve cosa que no deja de sorprendernos, pero
nos anima y parece que la gente está con el ánimo de llegar más arriba.
Los primeros Pinsapos que no me
da tiempo de fotografiar, “entre el Wilkes y el GPS”, “algunas veces no bebes
ni agua”, así que paramos para reponer ya estamos casi a los 1.500 mts y nos
sorprende un gran nevero que en algunas zonas tiene 30 cms de nieve.
Dejamos el juego para la bajada
porque ahora el objetivo principal es hacer cumbre con el grupo completo, unos
25 minutos y nos encontramos ante un murallón de rocas que nos obligará a
utilizar las manos con destreza, procurando nos resbalar, sin perder de vista
la cola del grupo vamos subiendo lentamente, algunos listillos ya nos adelanta,
“parece que le van a imponer alguna medalla”.
Señoras y señores llegamos todos
sano y salvo, así que ahora a disfrutar, contamos unos dieciséis pueblos tres
pantanos y numerosas cumbres hasta Sierra Nevada, con muchísimo cuidado al
asomarnos, pues la caída es vertiginosa más de 300 mts.
Es el momento de desayunar, pues
no queremos quedarnos sin fuerzas para la bajada, tendremos tiempo para
disfrutar y contactar curiosamente con unos senderistas que se encuentran en
Morón y nos piden “contacto”, cosa que realizamos.
Es el momento de iniciar la
bajada y al igual que al comienzo me comprometen a dirigir al grupo cosa que
hago con mucho gusto, despacito sin prisas, disfrutando, llegamos al nevero y
sin comerlo, ni beberlo “guerra de bolas”, un momento muy agradable y de
diversión.
Con algún que otro resbalón y
aproximadamente durante hora y media, habremos llegado al final de nuestro
trayecto, de momento porque ahora nos vamos a Benamahoma donde comeremos
nuestros bocadillos en la plazoletilla junto a la fuente.
Después nos dirigimos a las Salinas de Iptuci,
curiosa explotación de origen romano que los actuales propietarios con muestran
con total amabilidad, cosa de agradecer. Ponemos punto final a nuestra
fantástica ruta de hoy y ahora con precaución de vuelta a casa.
CARLOS Y PETRA MIEMBROS DEL CLUB AL-SENDERO
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